Hay muchos conceptos erróneos comunes sobre Andorra, un pequeño país sin salida al mar entre Francia y España en los Pirineos.
Aquellos que saben lo suficiente sobre el aspecto financiero de un país como para ser peligrosos suelen utilizar la palabra “paraíso fiscal” en su descripción.
¿Pero es realmente Andorra un paraíso fiscal?
¿Qué hace que un país sea un paraíso fiscal?
Existen muchas definiciones diferentes del término paraíso fiscal.
La Oficina de Responsabilidad Gubernamental considera los siguientes signos para indicar que un país es un paraíso fiscal:
- impuestos nominales o nulos;
- falta de intercambio efectivo de información fiscal con autoridades fiscales extranjeras;
- falta de transparencia en la aplicación de disposiciones legislativas, legales o administrativas;
- no se requiere una presencia local significativa;
- y la autopromoción como centro financiero extraterritorial.
De manera similar, la OCDE utiliza 3 factores en su evaluación de los países:
- impuestos nominales o nulos
- protección de la información financiera personal
- falta de transparencia
Lo interesante es la actitud negativa hacia los paraísos fiscales. El periodista australiano Sinclair Davidson escribe: “Lejos de tener un impacto negativo en sus vecinos, los paraísos fiscales parecen tener un impacto positivo en la actividad económica”.
Listas negras
Los países que oficialmente son considerados paraísos fiscales están incluidos en la llamada lista negra del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
El GAFI identifica públicamente a los países con regímenes débiles contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
La OCDE tiene su propia lista de “paraísos fiscales no cooperativos”.
La UE también tiene una lista de “jurisdicciones fiscales no cooperativas”.
La ironía de estas listas es que si se utilizaran los mismos criterios en muchos países miembros, muchos de ellos terminarían ellos mismos en listas negras.
Sin embargo, Andorra no está incluida (como paraíso fiscal) en estas listas negras.
¿Por qué la gente piensa que Andorra es un paraíso fiscal?
Quienes no quieren utilizar la definición legal suelen utilizar el término en un sentido más general.
Muchos ven un paraíso fiscal como un lugar donde las personas o empresas residentes pueden hacer negocios sin pagar impuestos o pagarlos a tasas bajas.
El sistema fiscal andorrano es muy favorable;
- el impuesto sobre la renta personal superior a 40.000 euros se limita al 10%,
- el impuesto de sociedades está limitado al 10%,
- no hay doble imposición, es decir, si tu empresa paga el 10%, entonces te pagan dividendos, tributarás al tipo del 0%,
- El IGI, el impuesto sobre las ventas de Andorra, es del 4,5% para la mayoría de los bienes y servicios.
- Los impuestos inmobiliarios andorranos son muy razonables.
Basándose únicamente en el tipo del impuesto sobre la renta, mucha gente podría llamar a Andorra un paraíso fiscal. Si se sigue esta lógica, se puede decir lo mismo de países tan famosos como la República Checa, Hong Kong, Singapur y Suiza.
Del mismo modo, cuando se trata de tipos impositivos corporativos, muchos países gravan a las empresas residentes con tipos más bajos que Andorra, como Estonia, Letonia, Malta y Hungría.
Entonces, ¿Andorra es un paraíso fiscal?
Desde una perspectiva legal, la respuesta es un claro “no”. Andorra respeta las reglas y complace a sus vecinos en la economía global creando sistemas que le permiten al país cumplir con las reglas.
Pero cuando se habla con personas que no son abogados fiscales, muchos seguirán refiriéndose a Andorra como un paraíso fiscal. Si su definición de paraíso fiscal es un lugar donde puede residir legalmente y pagar una tasa impositiva muy justa, entonces su respuesta probablemente sea sí.
Andorra trabaja duro para establecer acuerdos de doble imposición con países de todo el mundo. La lista es corta, pero es importante recordar que Andorra es un país pequeño con pocos funcionarios gubernamentales. Estas cosas toman tiempo.
Si Andorra no es un paraíso fiscal, ¿por qué el tipo impositivo es tan bajo?
La verdad es que durante mucho tiempo la situación fiscal en Andorra fue feliz. Pequeña y eficiente, Andorra es en realidad “barata de gestionar”.
Vicen Mateu, Síndico General del Parlamento de Andorra, afirmó recientemente: “Andorra nunca ha tomado una decisión estratégica de convertirse en un paraíso fiscal . Continuó diciendo que un impuesto sobre las ventas de bienes y servicios tiene el potencial de financiar el presupuesto de Andorra sin necesidad de imponer otros impuestos. Sin embargo, este régimen fiscal ha causado preocupación entre los vecinos y los países no pertenecientes a la CEI.
Andorra: un país compatible con impuestos bajos para vivir y hacer negocios
Está claro que Andorra planea cooperar y contribuir a la economía global, pero al ser un país pequeño, es probable que sea “demasiado lento” para complacer siempre a la OCDE y otras organizaciones.
Es probable que Andorra permanezca en una zona gris para muchos gobiernos y organismos políticos en los próximos años, ya que el país mantiene tasas impositivas justas y el sistema bancario andorrano trabaja para adaptarse a estándares que cambian rápidamente.
Si está buscando un país con impuestos bajos para vivir o hacer negocios, ¡Andorra es un gran lugar a considerar!